Objetivos a alcanzar:

 


Analizar:

Recurso donde el estudio de un problema, fenómeno u objeto se realiza descomponiéndolo en unidades más pequeñas con el fin de razonar y entender su constitución. El análisis se realiza siempre sobre la información. Se trata de encontrar su estructura (las partes y las relaciones entre ellas), con el fin de simplificarlo y comprenderlo. Favorece, por lo tanto, la comprensión de temas complejos. Pueden analizarse comportamientos de uno mismo y de los demás, determinadas situaciones, diferentes alternativas y sus consecuencias, puntos de vista contrastados, etc.

Aplicar Aprendizajes:

Poner en práctica, en un entorno real o simulado, conocimientos, habilidades o actitudes adquiridos por el estudiante. La aplicación de aprendizajes puede ser una herramienta de evaluación de la actividad educativa, como un recurso para reforzar y consolidar el aprendizaje. Para el estudiante puede suponer muchas ventajas, ya que le permite ejercitarse, comprobar por sí mismo las informaciones recibidas, experimentar, comprender...

Argumentar:

Incorporar informaciones a los esquemas mentales y cognitivos de la persona de manera que se produzca un cierto grado de reestructuración entre ellos, un cambio. Hay una parte de transmisión de información, pero ésta por sí sola no asegura la adquisición de conocimientos. Se requiere que el estudiante procese la información, cosa que podemos favorecer mediante diferentes recursos metodológicos.

Buscar:

Actividad donde el estudiante tiene que descubrir algo, encontrar soluciones a los problemas, buscar posibles formas de actuación, etc. A partir de este descubrimiento pueden pedirse otras actividades consecuentes: explicar, inferir, argumentar, generar ideas, reconstruir, relacionar, valorar, etc.

Identificar:

Actividades donde el estudiante tiene que reconocer un determinado elemento dentro de un conjunto.Esto se realiza siempre a partir de la transmisión de información y muchas veces desde una definición o descripción previamente proporcionada. Ayuda a la adquisición de conocimiento. En la evaluación, mediante la identificación se evita que el estudiante se limite a memorizar y reproducir información: para identificarla necesita comprenderla.

Interpretar:

Actividad donde el estudiante tiene que dar o atribuir a una cosa una significación determinada. El profesor puede haber decidido cuál es el significado correcto pero, generalmente, se utiliza con contenidos o realidades que admiten diversas significaciones. Requiere disponer de una información previa memorizada (aprendizajes previos), mantener la atención y seleccionar la información que se tendrá en cuenta.

Tomar decisiones:

Se trata de llegar a conclusiones comprendidas y aceptadas por todos los implicados sobre las acciones que se realizarán en un momento determinado. La aplicación de la decisión que se ha tomado es un hecho secundario en la actividad, ya que el énfasis se encuentra en el proceso de toma de decisiones y en las consecuencias de la decisión tomada. Estas actividades implican la comprensión de la información de que se dispone y que se tengan en cuenta las diferentes posibilidades, alternativas o estrategias de acción.

Pronosticar:

Actividades donde los estudiantes, partiendo del análisis de datos obtenidos sobre el comportamiento pasado y presente, prevén futuros fenómenos. Este pronóstico es siempre un juicio, requiere argumentar y resulta muy útil para planificar y para tomar decisiones de actuación.

Reflexionar:

Actividades donde el estudiante tendrá que volver sobre una información dada o un conocimiento adquirido, y tenerlos muy en cuenta para profundizar en ellos. Mediante la reflexión, el estudiante intenta salir de sus juicios y concepciones previos, para volver a contemplar la realidad. Al mismo tiempo, examina la base de su propio pensamiento. Como resultado se forma una nueva representación interna del objeto de reflexión. Así, es uno de los factores de cambio o aprendizaje más potentes. Estas actividades las puede más o menos concretar el profesor. Algunas se orientan a estimular o favorecer la reflexión del estudiante. En cualquier caso, la reflexión, como actividad interna, requerirá la motivación y voluntad del estudiante. Este aspecto es un elemento clave en la elaboración del recurso.

Relacionar:

Actividades donde el estudiante tendrá que establecer vínculos, conexiones, entre dos o más términos o conceptos, hechos, datos, informaciones o conocimientos, según unos determinados criterios habitualmente establecidos por el profesor.

 

 

Definición del recurso: El estudio de caso presenta y contextualiza una situación o problema real o ficticio, en el cual intervienen múltiples factores, con la finalidad que el estudiante, con toda la información inicial que se aporta, proponga formas de actuación para resolverla.
Este recurso tiene en común con el juego de rol que el estudiante tiene que ponerse en el lugar de un personaje (un profesional, el usuario de un servicio, etc.); pero mientras que en el juego de rol se prioriza la valoración sobre todo de las emociones y de las actitudes, en el estudio de caso se valora especialmente la aplicación práctica de los conocimientos que el estudiante ha alcanzado sobre la materia y los que está adquiriendo con el recurso.

El estudio de caso forma y capacita a los estudiantes en la habilidad de identificar problemas, de analizarlos y de buscar posibles soluciones. Sirve para situar a los estudiantes en circunstancias o casos de la vida real, facilitándoles que interrelacionen los contenidos de la asignatura o módulo con herramientas para la resolución del caso, y en un entorno seguro, ya que lo que se elabora son hipótesis de trabajo.

Aunque la elaboración de este recurso requiere una inversión inicial de tiempo considerable, permite que se utilice durante bastante tiempo posteriormente y con otros grupos, si hacemos las modificaciones y actualizaciones que se crean convenientes.

El estudio de caso admite diversas presentaciones; a partir de nuestra experiencia diferenciamos:

- El estudio de caso general
- El estudio de caso específico
Estos dos tipos de estudio de caso pueden plantearse como:
– Estudio general abierto
– Estudio general cerrado
– Estudio específico abierto
– Estudio específico cerrado

Orientaciones de aplicación:

Este recurso puede aplicarse perfectamente de forma no presencial y asincrónica, es decir, sin que los participantes compartan un espacio y un tiempo comunes. Sólo se necesita un espacio en web en que el estudiante encontrará toda la información necesaria para el desarrollo del caso y unos buzones compartidos en los cuales se llevará a cabo la interacción entre estudiante-consultor o estudiante-estudiantes, según como lo haya establecido el consultor en el momento de elaborar el recurso.
El estudio de caso presenta una situación o problema vivido para un individuo o entidad real o ficticia que el estudiante tendrá que encontrar al conectarse. Esta presentación tiene que incluir los objetivos, el método de trabajo, el material adicional, la guía que tiene que servir para la resolución del caso y los criterios de evaluación.

Para que el proceso de aprendizaje sea completo, el consultor tiene que facilitar a los estudiantes el apoyo teórico y conceptual suficiente para la resolución del caso y establecer un calendario para resolverlo.

Durante el tiempo que se habrá determinado para llevar a cabo el estudio del caso, el estudiante o los miembros del grupo (según se haya preestablecido) trabajan por su cuenta, con el apoyo del consultor, el cual estimula y fomenta la participación y la reflexión. Si se trabaja en grupo, el consultor tiene que evitar que se monopolice la discusión o bien que alguien no intervenga, y favorecer en todo momento la interacción entre los participantes.

Si el caso se resuelve en grupo, la puesta en común de las varias soluciones al caso y la conclusión del consultor, que aporta su pericia sobre el tema, es una de las maneras recomendadas de poner fin a la actividad. Evidentemente, puede haber otros sistemas. Éste es un recurso lleno de posibilidades, cuya explotación queda abierta a la libre elección de los autores.

Dinámica de trabajo: Individual y grupo
Pautas de elaboración: Las pautas generales para la elaboración de un estudio de caso son:
1. Establecer los objetivos finales o intermedios que quieren alcanzarse mediante el planteamiento del caso (sobre todo en lo que concierne a habilidades y procedimientos) y los criterios de evaluación.
2. Definir los contenidos que será preciso que el caso transmita a los participantes.
3. Decidir el método de trabajo (teniendo en cuenta el entorno y las posibilidades de comunicación: buzones compartidos, personales, etc.).
4. Decidir cómo se presentará y desarrollará toda esta información a partir de los media que tenemos a nuestra disposición (texto e hipertexto, imagen fija y animada, audio, vídeo, gráficos...), siempre que estos canales estén justificados desde un punto de vista pedagógico.


El planteamiento de la actividad tiene que incluir:
– Los objetivos que quieren alcanzarse.
– La exposición de la situación o problemática.
– La guía o itinerario para la discusión (si la actividad se hace en grupo).
– Los materiales adicionales que se incluirán con enlaces, referencias, etc.
– Las actividades complementarias que pueden ayudar a evaluar los conocimientos iniciales o provocar reflexiones para la resolución del caso.
– El esquema del caso (diagrama del caso con la información adicional, actividades...).
Implementación:
– El consultor presenta los objetivos que es preciso que los estudiantes alcancen en el transcurso de la actividad.
– Los estudiantes leen, escuchan o visionan (en función de como se presenta el caso que se les asigna), para familiarizarse con la problemática, para identificar los temas más relevantes y plantear las posibles alternativas para tratarlos.
– Si la dinámica es de grupo, a partir de la guía/itinerario para la discusión se llevará a cabo una puesta en común y un intercambio de ideas sobre lo que sucede y lo que haría falta hacer. El consultor será un apoyo en el transcurso de esta interacción: facilitará el proceso, dará orientaciones si lo cree conveniente o cuando lo requiera el grupo y estimulará a la participación de todo el mundo.
– Los estudiantes elaborarán y presentarán una solución del caso.